domingo, 5 de mayo de 2013


"Sin embargo, cuando llega un día tan difícil que me dura casi 72 horas de pena infranqueable y de cuerpo triste y cabeza embarullada. Cuando me sorprende a mi misma tener este humor tan particular que casi nunca me define. Cuando todo lo que habitualmente forma parte escencial de mi vida me cuesta tanto. Cuando me descubro pensando que me desconozco, aparece un trámite con fecha de caducidad y descubro que es, otra vez, este día.

Llueve.
Acá. En mi.
Diluvia."