jueves, 29 de diciembre de 2011

No pretendo que lo entiendan. Ni tampoco que justo ahora empiecen a desarrollar cierta empatía conmigo cuando nunca lo hicieron, pero también es demasiado obvio que no soy de piedra. Que haya hecho determinada elección no significa que no me duela, que sea la única responsable de esa elección no significa que eso no rompa mi corazón en quinientos pedazos, ni que no sienta que martillean cada uno de los pedacitos hasta hacerlos de un polvo que se confunde con el viento. Si, tal vez exagero, pero la metáfora encaja perfectamente con lo que siento.

jueves, 22 de diciembre de 2011

Se que suena en exceso cliché, pero definitivamente te quiero a vos para Navidad. 
Listo, lo dije.

lunes, 19 de diciembre de 2011

En el momento en que tenes que empezar a explicarlo todo. Es en ese momento exactamente cuando una relación deja de ser un vinculo para convertirse en un cargo.

jueves, 8 de diciembre de 2011

Si hay algo que trató de enseñarme siempre mi familia, toda mi familia no solo la cercana, es que no se puede tener todo. Y no digo “no se puede tener todo” en un sentido pesimista, hoy finalmente lo entiendo. No se puede tener todo en el sentido de que uno tiene que afrontar las consecuencias de sus elecciones, de sus preferencias. Como siempre digo, todo en la vida tiene un lado bueno y uno malo, una parte que implica sacrificio y otra gratificación. Un gran privilegio, una gran gratificación, implica un gran sacrificio. No se pueden lograr nuestras metas más altas si no estamos dispuestos a ceder parte de nosotros al mismo tiempo, y, vuelvo a aclarar, no en un sentido pesimista, siempre mirando lo bueno que obtenemos, el placer de llegar a cumplir esa meta que va anular totalmente todo lo desgratificante del camino que nos lleva obtenerla. No sé, también últimamente me da muchas vueltas en la cabeza la idea del karma, de que es demasiado egoísta pretender tener todo. Y no "tener" en un sentido de posesión, de materialismo, sino algo así como de poder “disfrutar” de todo. Las elecciones del día a día, las elecciones a futuro significan que dejamos de lado otras opciones, que elegimos la que nos parece más adecuada para nosotros, la que mejor nos complementa, dejando de lado las que, eligiéndolas, nos dejarían con las ganas de haber elegido otra cosa. Con esto quiero decir, que no es que se desprecian las otras opciones, sino que siempre va a haber una predilección por ciertas cosas, que en cada persona van a ser totalmente diferentes. No creo que se pueda pretender tener excelentes notas en la facultad y a la vez mantener una vida social al 100%,  no creo que se pueda ser bueno en matemáticas y en lengua, no creo que se pueda tener todo el dinero del mundo y a la vez conservar la sensibilidad social, no creo que se pueda estar en pareja y querer vivir como si no lo estuvieras, no creo que se pueda ser el mejor en situaciones de razonamiento y a la vez en situaciones de creatividad, no creo que se pueda satisfacer completamente y a la vez al corazón y a la cabeza, no creo poder vivir con mi conciencia sabiendo que mi familia me está costeando el sueño de mi vida y a la vez salir todos los fines de semana o seguir teniendo los privilegios de siempre o irme también de vacaciones de verano como si no me diera cuenta del sacrificio y el esfuerzo que están haciendo (y no hablo solamente en sentido monetario), no creo que pueda ajustar para bien ciertos aspectos de mi vida sin que otros declinen, no creo que sea posible centrarme en repararme a mí, en sentirme bien conmigo de una vez por todas sin que peligre el sentirme bien con los demás, pero al final de todo esa es la cuestión, saber encontrar el equilibrio, ser lo suficientemente valiente como para asumir los malos aspectos de nuestras elecciones, porque se supone que si tomamos cierta decisión ya están incluida en ellas esos malos aspectos. Y no hablo de conformarse, sino de todo lo contrario, de apostar a algo, de arriesgarse a cumplir las metas de nuestra vida, siendo lo suficientemente osado para jugarnos por eso y aceptar las consecuencias, porque la mayoría de las veces jugar a querer todo nos lleva a tener nada.

domingo, 4 de diciembre de 2011

Ya me acostumbré a la idea de que la gente siempre, ante cualquier situación, va a pensar primero en que consecuencias trae eso para ellos mismos, pero que ante una situación problemática, ante una situación de diferentes visiones siempre piensen que ellos son el problema ya me parece el colmo. Deberíamos ser mas objetivistas, abrir un poco mas los ojos, ya no se como llamarlo, y tal vez pensar que el problema esta muy pero muy lejos de ser ellos mismos. Deberían implementar el famoso pensamiento lateral y darse cuenta que tal vez el "problema" soy yo, yo conmigo misma, sin tener ustedes absolutamente nada que ver. No todo intenta herir nuestro narcisismo.

sábado, 3 de diciembre de 2011

En los mensajes de texto enviados a las 4 de la mañana hay una finísima linea entre "esto que te digo realmente me pasa" y "necesito no sentirme tan solo". ¿Como desciframos de que lado esta el mensaje para reaccionar de la manera correcta y no quedar tan idiotas cuando al emisor se le vayan los efectos del alcohol?