martes, 2 de noviembre de 2010

Tal vez sera que escribo esto muy enojada, pero viste esos momentos que tenes muchas ganas de gritarle a alguien en la cara? Si, estoy en uno de esos, asi que necesito descargar, esta es mi nueva forma de gritar. No porque yo quiera, sino porque ni siquiera me permiten descargar mi enojo. No me molestan las cosas no hechas, me molestan que digan algo y hagan otra cosa, me molesta ordenar mis tiempos dependiendo de alguien para que despues ese alguien termine haciendo lo que quiere sin siquiera hacermelo saber, me molesta ser tan tarada como para seguir creyendo en la gente. Si, masoquista, eso es, masoquista ¿Como no lo vi antes? Con la cantidad de personas hermosas que me rodean, uno se empeña en seguir tratando de generar cosas inexistentes en personas no valiosas. Estupida y torturante compulsion de repeticion. Y lo peor de todo, es que me haya sentido culpable de ver cosas turbias donde no las habia, no me entiendo, ¿Culpable de que? Como si no tuviera suficientes motivos y bases para fundamentarme. Es asi, no aprendo, no es el otro el culpable, soy yo que me encanta tropezar miles de veces con la misma piedra. Los demas pueden hacer lo que quieren, uno elige que cartas jugarse y por quien. Estas cosas pasan cuando no aprendemos de apuestas perdidas.

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