¡ Wherever !

Buen año. Osea, relativamente hablando, tuvo sus cosas buenas y sus cosas malas, pero el balance final me da un buen resultado. Aprendi que nadie te regala nada, que cada objetivo propio que quieras lograr lo vas a tener que hacer vos solo, por tus propios medios y con tus propias ganas, nadie te va a ayudar a menos que obtenga un beneficio para el mismo en la realizacion de tus sueños. Entendi que las personas grandes no cambian, vi de frente lo que nunca quiero llegar a ser y entendi que hay miles de formas de crecer, algunas forzadas y otras a eleccion, pero lo que siempre podemos elegir es quien queremos ser en realidad, como nos manejamos con lo que nos tira la vida, esa es la verdadera esencia de cada uno, como sorteamos o enfrentamos nuestro camino, como elegimos enfrentarlo. Me enseñaron a la fuerza que nada es lo que parece, ni todo lo bueno, ni todo lo malo, que nunca terminas de conocer a una persona, que las personas en las que mas confias pueden ser las que mas te terminen fallando, que esa confianza es la que les permite hacer eso, que ni ellos ni uno tienen la culpa de esos errores, pero que como los solucionamos o la manera en que nos hacemos cargo de eso, te puede hacer dar un vuelco de 360 grados a la perspectiva que tenias de esa persona. Aprendi a valorar las pequeñas cosas, como un abrazo, un te quiero o un simple gracias y entendi que las cosas que te marcan son esas, no lo ostentoso que puede ser un regalo o lo que puedas tener. Me prometi a mi misma nunca mas volver a poner las manos en el fuego por nadie ni nada, porque por mas que uno se ponga la defensa que se ponga, las cosas que te lastimaron siempre vuelven, cuesta muchisimo dejarlas atras, borrar las huellas y empezar de cero, y descubri que volver a confiar ciegamente en alguien es lo que mas me cuesta en el mundo. Aprendi a cambiar mi orgullo y mis enojos por risas y mas anecdotas por compartir. Gracias a mi primer trabajo me di cuenta de que los que mas tienen son los que mas avaros son, confirme mi teoria de que los abogados, ironicamente, son los que menos sentido de justicia tienen, y llegue a mi limite cuando este abogaducho me dijo maleducada por devolver un paquete de servilletas, cosa que nunca voy a entender, y que no quiero entender nunca, porque tendria que tener mucha mierda en la cabeza, y tuve otro gran ejemplo de lo que nunca quiero llegar a ser. Puse al maximo mi paciencia cuando me cruce con una de las personas mas egoistas, menos caballerosas y mas estupidas de las que me voy a cruzar en mi vida, un flaco depresivo compulsivo tratando de aparentar tantas cosas que no es, negando su realidad como si fuera de vida o muerte, quejandose de un trabajo en el que es libre de encerrarse en una oficina con aire acondicionado y una computadora con toda la internet que pueda consumir, alguien tan inseguro de si mismo que no logra tener una idea cerrada de nada, que no se pone de acuerdo con su papel laboral, no haciendose cargo de sus obligaciones, pero si de sus beneficios y siempre desplazando los trabajos suyos a quien pueda, con tal de sentarse a fumar su cigarrillo mientras larga la tipica perorata de cuan estresantes son sus actividades. Tengo la esperanaza de no haber terminado de conocer a estar personas y que aun a pesar de todo lo malo que vi, tengan su lado amable y bondadoso. Pero como siempre me esfuerzo por resaltar, mi primer trabajo tambien tuvo su lado bueno, conoci personas hermosas, cada una con una historia y personalidad unica. Todas totalmente diferentes, pero con las que pude tener una linda amistad, con las que me rei y me encariñe muchisimo. Ellas me enseñaron que por mas diferentes que sean los caminos u objetivos que tengamos, lo importante es las busqueda de la realizacion de esos objetivos y la realidad que teniamos en comun, al igual que mis compañeras de facultad, las unicas que entiende mi obsesion por la psicologia y con las que puedo explayarme libremente sobre eso, las que mas me ayudan superarme dia a dia, mis compañeras de estudio con mates, marcadores, recreos, charlas y masitas, durante dias, mañanas, tardes y noches. 

Como siempre lo supe, pero nunca lo acepte del todo, mis amigos son mi vida, son personas maravillosas, hermosas, que nunca quiero dejar de tener, con ellos aprendi, que los lazos afectivos son mas importantes, diria que casi los unicos importantes, que las palabras valen mucho y que nunca quiero dejar de seguir eligiendolos como la familia que en realidad son para mi. Aprendi que hay cosas que no se curan nunca, que una persona puede ocupar el lugar de otra, pero que nunca va a lograr reemplazarla, que los recuerdos quedan y que algunos te terminan lastimando por acciones del presente, tipico efecto nachtraglich. Aprendi a superar las distancias y las diferencias, porque al final lo que importa es la persona en si, no sus defectos. A traves de vivencias de otras personas, vi lo crueles que pueden ser los que no saben realmente como sos, que la gente habla sin saber y que eso puede lastimar mucho mas que algun crimen tildado de imperdonable por la sociedad. Comparti momentos inolvidables con muchos, cumpli varios de mis objetivos, y por suerte tenia a quien contagiarles mi alegria por eso, como tambien tuve quienes me contagieron su alegria cuando lo necesite, quienes me prestaron su oido, me escucharon gritar, rezongar y quejarme para despues reirse conmigo del momento de furia para dejar de recuerdo solamente un leve enojo. En fin, tome miles y miles de mates, gaste como 30 marcadores, lei mas fotocopias que en todos mis 19 años anteriores juntos, complete mi segunda decada sin lograr enteder por completo el concepto del amor, pero aprendi a encontrarlo en cada rinconcito de mi vida en todas sus formas, reformule mi concepcion de la familia, supere o aprendi a convivir con mis subjetividades y con las de los demas. En fin, creci, creci muchisimo, algunos sabran mas, otros sabran menos, pero cada uno me ayudo a su manera a hacer de este año, un año unico en muchos sentidos. Gracias a todos los que saben que forman parte de eso, y a los que no lo saben, tambien. Vamos por un 2011 igual o mejor que este año que se termina, pero que empieza muy distinto a los anteriores (en el sentido bueno, obviamente).